Los 100 vinos más atractivos de 2011 para Wine Spectator

[Fuente: winesfromspain.com]

Siete vinos españoles figuran en la exclusiva lista ‘Top 100’.

Los resultados ponen de manifiesto la diversidad de los vinos españoles de calidad.

Fiel a su cita anual, Wine Spectator, la prestigiosa publicación estadounidense, ha publicado recientemente su lista ‘Top 100’ para el año 2011. En esta ocasión han sido siete los vinos españoles —seis tintos y un blanco— los que, a juicio de los catadores de la revista, han merecido figurar en tan influyente selección.

Ribera del Duero (2), Bierzo, Rioja (2), Valdeorras y Toro han sido las denominaciones de origen de las elaboraciones seleccionadas, un claro indicador de la diversidad de los vinos españoles de calidad. ‘De Restia Crianza Selected Harvest 2004’, de Bodegas Resalte (Ribera del Duero), ocupa el lugar 23, con 93 puntos.

Le siguen ‘Pétalos 2009’ (Descendientes de J. Palacios, Bierzo), en el puesto 26, también con 93 puntos; ‘Astrales 2008’ (Bodegas Los Astrales, Ribera del Duero), el número 53 de la lista, con 94 puntos; ‘Dinastía Vivanco Crianza 2008’ (Bodegas Dinastía Vivanco, Rioja), en el puesto 59, con 90 puntos; ‘Viña Godeval 2010’ (Bodegas Godeval, Valdeorras), el número 71, con 90 puntos; ‘Gago 2007’ (Telmo Rodríguez, Toro), en el puesto 89, con 91 puntos; y ‘Beronia Gran Reserva 2001’ (Bodegas Beronia, Rioja), en el lugar 91, con 90 puntos.

Desde 1988, Wine Spectator elabora cada año su lista ‘Top 100’. En ella se incluyen los vinos más atractivos de entre los evaluados por la publicación en los doce meses anteriores. De los 16.000 vinos catados a ciegas, más de 5.400 han recibido 90 puntos o más en la escala de 0 a 100 de la revista. Para confeccionar la lista final, de solo un centenar de vinos, se han tenido en cuenta cuatro criterios: la calidad (representada por la puntuación), el ‘valor’ (reflejado por el precio), la disponibilidad (según el número de cajas importada en Estados Unidos), y lo que los redactores de la publicación llaman ‘el factor X’, algo que podría traducirse como el atractivo o la excitación producida por un bodeguero emergente, una elaboración singular o un vino muy representativo de una determinada región vinícola.

Mientras que la calidad media de los vinos presentes en la lista de 2011 ha sido de 93 puntos, el precio medio ha bajado en 4 dólares por botella con respecto a 2010, situándose en 44 dólares. Teniendo en cuenta que la media de los vinos con 90 o más puntos, catados este año por Wine Spectator, es de 70 dólares, los vinos españoles elegidos son auténticos ‘grandes valores’: aunque uno de ellos está justo en la media, los otros seis se sitúan entre los 15 y los 30 dólares.