La Cata Nacional de Mujeres de Sacramenia alcanza las 200 participantes en una auténtica fiesta del vino

La sumiller Maria Isabel Mijares reivindica el papel de la mujer como impulsora de consumo para recuperar la cultura del vino en España.

La presencia de la urugaya Adela Viscay dota de carácter internacional a un evento que, cada año, cuenta con una mayor afluencia de participantes.

Alrededor de 200 participantes se han dado cita en la IV Cata Nacional de Vino para Mujeres y I Cata Internacional que se ha celebrado hoy en la localidad segoviana de Sacramenia, organizada por Bodegas Zarraguilla. El evento ha contado con la presencia de María Isabel Mijares, una de las mujeres españolas con más peso a nivel internacional en el mundo vitivinícola.

Precisamente, ella ha sido la encargada de dirigir la cata, emplazada a los pies de la iglesia románica de Santa Marina. Durante la misma, Mijares ha resaltado el papel de la mujer como impulsora del consumo de vino ante la necesidad de recuperar la cultura enológica en nuestro país.

En la presente edición, la uruguaya Adela Viscay, ha dotado de carácter internacional a este certamen. Se trata de una sumiller que, en la actualidad, trabaja en un importante proyecto vitivinícola en la frontera salmantina de Ribera del Duero con Portugal.

Además, en la mesa, destacados profesionales han aportado su experiencia a la hora de degustar los ocho caldos elegidos para la ocasión. Miguel Ángel Benito, Coordinador de Comunicación de la Asociación de Sumilleres de la región, abría la cata con un espumoso de Castilla y León de Ariane con D.O Toro que, apuntaba, “ es un vino de burbuja pequeña que le otorga una alta calidad y un sabor ácido y prolongado”.

En segundo lugar, el sumiller Teodoro Corral, mostraba las cualidades del Rueda Verdejo 100% Valladar, del que resaltaba los toques tropicales y el punto amargo “del buen verdejo”. La sumiller uruguaya Adela Viscay, ha sido la encargada de presentar el blanco Viñas del Vero de Somontano, un caldo de tierra zaragozana “que abre poco a poco en la boca con sabor a plátano y frutas chinas con un pasaje que perdura”.

La reivindicación por los caldos rosados ha estado protagonizada por un Villasancha Rosado Tempranillo de Valtiendas, del que Isabel Mijares ha querido resaltar la creatividad y el cuidado que requiere su elaboración.

El Zarraguilla Sirac, tinto pionero en Castilla y León, ha ocupado el quinto lugar de la cata. “Un caldo con tintes cerezas que al mover dejan lágrimas que recuerdan al Acueducto de Segovia, que para eso estamos en esta tierra”, señalaba el presidente de la Asociación de Sumilleres de Segovia Jose Luis Aragüe, conocido en el mundo del vino como ‘Mazaca’.

En sexto lugar, el caldo de Carmelo Rodero, Ribera del Duero, ha despertado los aplausos de las asistentes hacia el bodeguero allí presente. Un tinto con cuerpo de frutas, especias y flores y con aromas a cuero nuevo, toques minerales y tono balsámico.

Antes de finalizar, Óscar Hernando ha aprovechado la ocasión para presentar Vivencias, un tinto de Valtiendas que ha dado paso al Zeta 37, último vino en catar. Se trata de un tinto de Zarraguilla que ha sido el que ha puesto el broche final al multitudinario evento.

Cata exclusiva sólo para ellas con ‘guardería para ellos’

Como en la cata únicamente podían participar mujeres, la entidad organizadora, Bodegas Zarraguilla, ha habilitado una “guardería para maridos”. Un espacio que ha permitido a los acompañantes probar los caldos degustados en la cata, además de visitar las bodegas protagonistas del certamen. Asimismo, un espacio con castillos hinchables, ha ofrecido un área de diversión para los más pequeños.

Con esta iniciativa, Bodegas Zarraguilla pretende promocionar los vinos de la zona con el objetivo de dar a conocer en cualquier rincón de España y a nivel internacional las virtudes con las que cuentan los productos de la provincia de Segovia.

Bodegas Zarraguilla

Bodegas Zarraguilla cuenta con 15 hectáreas de viñedo en la D.O.P. Vino de Calidad de Valtiendas. La Bodega se encuentra ubicada en Sacramenia, al Norte de Segovia, entre los ríos Duero y Duratón. Pertenece a una saga familiar con una amplia trayectoria elaborando vino y que tiene en 1997 su punto de inflexión, año en el que dieron el salto de calidad con la bodega actual.

La bodega está asentada en una vieja casa de 1906 en la que se ha mantenido la estructura de piedra y la madera inicial. En la primera planta se sitúa la sala de catas y un museo etnográfico-vitivinícola. En la segunda planta encontramos las salas de embotellado y de barricas.

En dos naves, junto a la casa, se encuentran las salas de elaboración, con los depósitos de acero inoxidable, la sala botellero y almacén. Además, Bodegas Zarraguilla cuenta con un comedor para más de 50 comensales.