Vinos y espumosos, un buen negocio

[Fuente: eleconomista.es]

El vino y el champagne ya no solo son consumidos por las clases más altas, se han convertido en la bebida de culto y por ello sus productores han amasado grandes cantidades de dinero.

La lista de las 50 primeras fortunas del mundo del vino, publicada por la revista económica francesa Challenges, certifica que las fortunas de los empresarios dedicados a este sector es muy grande. En Evasión hemos decidido seleccionar cinco de entre todos estos multimillonarios de la bebida alcohólica.

El primer lugar ranking lo ocupa uno de los número de los más ricos del mundo, Bernard Arnault. Este empresario no es propietario de una, sino de seis marcas de champagne: Moët&Chandon, una de las más prestigiosas y conocidas del mundo; Veuve Clicquot, Ruinar, Dom Pérignon, otro clásico de los espumosos, y Krung. El dueño de estas firmas ha conseguido acumular una fortuna de 1.300 millones de euros.

Pierre Castel también forma parte del top five de los ricos más ricos del mundo del vino. Le sigue muy de cerca Frédéric Rouzaud y su familia que con la marca de espumosos Louis Roederer ha conseguido llenar sus arcas con 650 millones de euros. Philippine de Rothschild logra un digo cuarto puesto, mientras que François Pinault se queda con el quinto.

Está claro que los vinos y el champagne son un valor seguro para hacerse un hueco entre el club de los más ricos.