Cómo producir un vino tinto excelente gracias al cambio climático

[Fuente: lainformacion.com]

La bodega Gramona, conocida por su producción de cava en la comarca del Penedés, fabrica un vino dulce debido al aumento de temperatura.

Como cada año desde 1997, la bodega familiar Gramona esperaba obtener en 2009 su añada de tinto Brut, una excepción exquisita en su tradición de producción de cavas y de caldos blancos. De las 500.000 botellas que cada año produce esta firma que ya va por su quinta generación de productores del Penedés, cuna del cava, unas 4.000 se dedican al vino tinto de uva 100% Pinot Noir. Pero la de 2009 no fue una cosecha como las anteriores. De los 14 grados de alcohol que suele registrar este célebre caldo, se había pasado a 24 grados; “como si estuviéramos en Córdoba”, explican desde la compañía. Ningún vino tinto en España alcanza tal concentración de alcohol.

Así que Jaume Gramona, director técnico de la bodega, buscó una explicación a esta variación excepcional y la encontró de la mano de José Ramón Lisarrague, científico y profesor de la Universidad Politécnica de Madrid. El cambio climático había alterado la uva Pinot Noir, “la más afectada por el cambio climático”, explica Gramona.

La compañía fue la primera bodega que introdujo esta variedad en España, en 1988, para la elaboración de vino tinto. Traída desde la Borgoña francesa, su cultivo es muy delicado porque exige una temperatura fresca y no se adapta a cualquier terreno. Por ello, Gramona le destinó su mejor terreno pedregoso, calcáreo y con buena ventilación en Saint Sadurní d’Anoia, a 400 metros de altitud, en plena comarca del Penedés.

Tras más de una década de buen caldo, la de 2009 llegó sobremadurada. La concentración de azúcar era tan elevada que las levaduras, encargadas de transformar ese azúcar en alcohol, no resistieron y el proceso de fermentación quedó interrumpido. Pero la compañía decidió aprovechar ese proceso a medias para dar a luz su caldo ‘Gra a Gra’, una delicatessen dulce, fruto de la naturaleza.

El nombre responde al proceso de elaboración, en el que se selecciona grano a grano aquellas uvas que sirven para la realización del vino. “Servido entre 8 y 12 grados, resultará un excelente compañero de un bizcocho o de unas magdalenas”, reza el comunicado de Gramona. La empresa pudo haber salvado su Bru con productos fitosanitarios, como se suele hacer cuando el terreno no ofrece las condiciones idóneas para el vino. Pero la compañía decidió mantenerlo.

La cosecha de 2010 ha presentado las mismas características, “llevamos tres años observando este cambio de temperatura”, explican desde la compañía. En el Penedés, donde más del 50% del terreno se destina a la producción de cava,- la región registra 40.000 hectáreas-, la fiesta de la vendimia se celebra cada 24 de septiembre, “este año la hemos adelantado al 6 de agosto”. Por su parte, Lisarrague asegura que no se trata de un fenómenos anecdótico. Preguntado sobre si este incidente obligará a la compañía a abandonar la fabricación de su tinto Bru, Gramona dice “estar abierto a todo”.