El informe, elaborado por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv) con datos de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), ofrece la información más relevante del sector vitivinícola nacional e internacional durante el 2011.
El sector vinícola mundial cerró el ejercicio de 2011 con avances de producción y consumo. Por su parte, España finalizó el curso como uno de los grandes productores vinícolas del mundo, un rol que, dadas las estimaciones iniciales, continuará desarrollando a lo largo de 2012.
Durante el pasado año, nuestro país ocupó la primera posición en el ranking de superficie de cultivo plantada (1,032 millones de hectáreas), el segundo puesto en ventas de vino al exterior en términos de volumen (2.232,8 millones de litros) y el tercer lugar del podio en cuanto a producción (34,30 millones de hectolitros, 12,9% del total) y ventas en valor(2.240,6 millones de euros).
Un viñedo internacional en retroceso
Los datos de la OIV para el año 2011 -analizados por el OeMv, sitúan la superficie vitícola mundial en 7,49 millones de hectáreas, un dato que indica una disminución de la misma de 94.000 ha en relación al curso anterior.
El viñedo comunitario no ha escapado a esta tendencia bajista. La incidencia de varios factores, entre los que cabe destacar la reestructuración de las zonas de cultivo, el impacto de la crisis vitícola o el programa europeo de ayuda a los arranques, ha traído consigo una progresiva reducción de la superficie plantada hasta los 3,53 millones de ha (un 47,10% del total mundial). No obstante, esta rebaja se ha visto compensada con el mantenimiento de las áreas de cultivo en el resto del mundo, con variaciones a la baja en Argentina y Turquía, repuntes en China y Australia y estabilidad en Estados Unidosy Sudáfrica.
Producción y consumo al alza
En el capítulo de producción mundial, ésta se sitúa, según la OIV, en 265,8 millones de hectolitros (hl) -excluyendo zumo y mosto- para el año 2011, cifra que representa un aumento de 700.000 hl en relación a 2010. Francia, con 49,6 millones de hl (18,7%), ocupa el primer peldaño de dicha clasificación, siendo el primer productor de vinos con DOP e IGP. Al país galo le siguen Italia(41,6 millones de hl, un 15,6% y experimentando una importante contracción) y España (34,3 millones de hl, 12,9% mundial). Nuestro país lidera la tabla en cuanto a vinos varietales, sin IGP ni DOP (1,8 millones de hectolitros). Por su parte, Alemania (de 6,9 a 9,6 millones de hl) y Austria (2,8 millones de hl frente a los 1,8 millones del curso anterior) han incrementado de manera sustancial su volumen de producción en el intervalo de referencia.
Al margen de la Unión Europea –cuya producción total asciende a 156,9 millones de hl en 2011-, se constata un leve repunte, hasta los 108,9 millones, para el conjunto conformado, entre otros países, por EE UU (el país no europeo con mayor producción vinícola con 18,7 millones de hl), Argentina (15,5 millones de hl), Australia (11 millones de hl) y Chile (10,5 millones de hl).
Las estimaciones iniciales para el ejercicio de 2012 apuntan una reducción considerable de la vendimia, con importantes contracciones en Francia, Italia –que podría llegar a mínimos históricos- y España.
En materia de consumo, la OIV augura un volumen mundial de 241,9 millones de hectolitros para el curso de 2011, cifra que representa un ligero rebrote anual (+1,7 millones de hl) y que responde, en gran medida, a la previsión efectuada para los países ajenos al bloque comunitario, con China y EE UU a la cabeza de dicha tendencia al alza. Por el contrario, el consumo en el ‘Viejo Continente’ dibujará una trayectoria descendente (-864.000 hl) punteada por los principales consumidores, a saber, Italia, Reino Unido y España.
Importancia creciente del comercio exterior
La actividad relacionada con el comercio exterior continúa ganando peso dentro del sector vinícola internacional. Las estimaciones de la OIV apuntan a intercambios cifrados en 103,5 millones de hectolitros durante el pasado año, frente a los 72,2 millones de hl contabilizados en el periodo 2001-2005. Por su parte, en términos de valor, el importe global de las exportaciones de vino y mosto sumaría 23.264 millones de euros en el transcurso de 2011, un guarismo que avala un significativo incremento anual del 7,9%.
Así, durante el pasado año, las exportaciones mundiales de vino coparon el 42,8% del consumo mundial -frente al 34,6% de 2006-, dibujando un escenario donde las caídas del consumo en los ‘países tradicionalmente productores’ se suplen con repuntes de las importaciones en mercados incapaces de satisfacer su demanda con producción local.
En 2011, los cinco primeros exportadores del espacio comunitario (Italia, Francia, España, Alemania y Portugal) consiguen una cuota de mercado del 65,5% del total, según las estimaciones iniciales. Mientras, los seis países que conforman el grupo de ‘nuevos exportadores’ (Argentina, Chile, Sudáfrica, EE UU, Australia y Nueva Zelanda) ostentan el 25,2%, con la previsión de que dicha cuota crezca en el curso de 2012, consecuencia directa del paulatino descenso de los niveles de exportación de los mercados del ‘Viejo Mundo’ en detrimento del avance de la comercialización vinícola de los actores del ‘Nuevo Mundo’.
Para la OIV, la diferencia entre producción y consumo se ubica en un entorno de entre 15,7 y 32 millones de hectolitros, con una media de 23,9 millones de hl.
El caso español
El sector vitivinícola español, inmerso en un importante proceso de reestructuración, continúa desempeñando un papel protagonista de primer orden dentro del entramado económico nacional.
A pesar del descenso constatado por el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), que sitúa la superficie del viñedo español en 970.000 hectáreas en 2011, España cuenta con la mayor extensión (1,032 millones de hectáreas, según la OIV) de la Unión Europea (un 30% del total) y del mundo (13,80%).
En los últimos años, la producción nacional se ha caracterizado por su estabilidad, rondando los 40 millones de hectolitros. FEGA estima una producción de 40,9 millones de hl al cierre del pasado mes de noviembre, con un repunte interanual del 4,1%. Sin embargo, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) se muestra más pesimista y prevé una contracción del 5,6%, hasta los 38,6 millones de hl.
El protagonismo creciente adquirido por la actividad exportadora contrasta claramente con un consumo interno que, cercano a los 20 litros anuales per cápita, sitúa a nuestro país en el vagón de cola europeo.
Buen desempeño de las exportaciones
El vino es uno de los principales referentes de la exportación española. Al cierre del primer semestre de 2012, según los datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Tributaria, las ventas al exterior suman 1.073,5 millones de litros (+3,4%) por importe de 1.143,6 millones de euros (+13,5% en tasa interanual). En 2011, las exportaciones del sector registraron avances del 26,3% en volumen y del 16,7% en valor.
Para el Club de Vinos GTA Consulting, España capitanearía las exportaciones mundiales de vino en volumen en el primer semestre del año en curso, con 1.065 millones de litros –a falta de los datos de Italia-, rezagándose hasta la tercera posición en términos de valor (1.124,6 millones de euros), un ámbito claramente dominado por Francia.
Los últimos ejercicios han venido marcados por un importante desarrollo de la comercialización en el exterior de vino a granel y en envases de más de dos litros, a precios muy bajos. Esta línea de actuación ha permitido crecer mucho más en volumen que en valor. Sin embargo, en la primera mitad del año, dicha tendencia se ha revertido con subidas de precio –con una media de 1,06 euros el litro de exportación-, circunstancia que repercute de manera negativa en los volúmenes comercializados y que, a la larga, podría ocasionar erosiones en los niveles de facturación.
Los vinos con denominación de origen copan el 40,4% de la exportación nacional, mientras que las referencias de mesa envasadas evolucionan a un ritmo del 20,3%, hasta el entorno de los 200 millones de euros. El vino sin DOP a granel muestra un incremento en valor del 27% (230,8 millones de euros), consecuencia directa del encarecimiento del 30% de su precio medio, aunque en el transcurso de los seis primeros meses del ejercicio presenta una caída en volumen del 1,3% (555,3 millones de litros). Del mismo modo, los espumosos constatan un descenso en volumen del 4,7% y un aumento del 7,3% en valor.
La Unión Europea –que acapara cerca de dos tercios de las ventas españolas al exterior- continúa siendo el principal destino para los vinos de nuestro país. Alemania (+5,2%), Reino Unido (+9%), EE UU (+15,8%) y Francia (+31,2%) lideran el ranking de importadores en valor. Mientras, en volumen, el país galo se sitúa en cabeza como primer cliente (-0,5%), seguido de Alemania, Italia (+50% en relación al mismo periodo de 2011), el mercado británico y Portugal.
Puede consultar toda la información del estudio elaborado por el Observatorio Español del Mercado del Vino para Wines from Spain-ICEX en nuestra sección ‘El vino en cifras’.
Visto en winesfromspain.com.