14 Motivos para beber vino (con moderación)

Seguramente no hace falta que os demos ni una, pero aquí tenéis unas cuantas y saludables razones para beber vino.

Sabemos que a veces (o casi siempre) no hacen falta ni motivos. O porque sí, y punto, puede ser uno bueno. Pero, además, para beber vino hay ciertas razones saludables muy bien argumentadas. Aquí van algunas de ellas:

  1. Es bueno para el corazón: Un estudio de la Universidad de Harvard (EEUU) determinó con claridad que aquellas personas que consumen vino a diario en dosis moderadas tienen un 30% menos de probabilidades de sufrir un ataque cardíaco.
  2. Te hace más inteligente: Gracias a un consumo moderado de vino la respuesta cerebral a los estímulos aumenta, tanto en términos de calidad como de velocidad. Los tiempos de reacción disminuyen en un 25% y la creatividad aumenta en un 50%. Además, la relación vino-inteligencia es de doble sentido: algunas investigaciones han demostrado que las personas con un coeficiente intelectual más alto consumen más alcohol que las que tienen una puntuación inferior. Pero, empezar a beber vino no te volverá más inteligente de lo que eres. Es más, el abuso de esta bebida destruye las células cerebrales de manera irreversible.
  3. Ayuda a hacer amigos: Una copa de vino relaja, suelta la lengua, dejaa un lado la timidez… lo que puede hacer una cena mucho más divertida.
  4. Retrasa el envejecimiento: Debido a sus propiedades vasodilatadoras y antioxidantes nos ayuda a retrasar el proceso del envejecimiento.
  5. Rico en minerales: Litio (equilibrando el sistema nervioso), magnesio (reduce el estrés), zinc (mejora las defensas inmunitarias), potasio y calcio (equilibrio iónico y eléctrico) son algunos de los que aporta.
  6. Ayuda a bajar el colesterol: Según algunos estudios, una copa de vino tinto al día (que no el blanco cuya eficacia es menor), disminuye la concentración de placas aterogénicas en las arterias y aumenta los niveles de HDL o colesterol bueno, lo que mejora la salud cardiovascular.
  7. Bueno para los huesos: Un estudio de la Universidad de Tufts en Boston (EE.UU.) con más de 2.400 participantes, demostró que las mujeres que beben vino tienen menos posibilidades de perder masa ósea que las mujeres que no beben.
  8. Antibacteriano: Un estudio llevado a cabo por el experto Martin E. Weisse de la West Virginia University (EE.UU.) demostró que el vino tiene la capacidad de reducir las bacterias de los alimentos, protegiendo así al cuerpo humano.
  9. Antidepresivo: Un experimento llevado a cabo en varias universidades que se realizó con 2,683 hombres y 2,822 mujeres de entre 55 y 80 años durante un período de siete años demostró que, en ambos sexos, si bebían entre 6 o 7 vasos de vino por semana eran menos propensos a ser diagnosticados de depresión incluso teniendo en cuenta los factores de estilo de vida.
  10. Contra los rayos del sol: Los derivados del vino y de la uva pueden ayudar a reducir los efectos dañinos de los rayos UV según un artículo de la Universidad de Barcelona y publicado en la revista The Journal of Agricultural Food and Chemistry. En el estudio se explica que los flavonoides del vino y las uvas inhiben la formación de especies reactivas de oxígeno (ROS) que dañan las células de la piel.
  11. Reduce el riesgo de demencia: Un equipo de científicos de la Universidad de Loyola Medical Center (EE.UU.) encontró un riesgo significativamente menor de demencia entre los bebedores regulares y moderados de vino tinto en 14 países diferentes. Y es que el resveratrol reduce la viscosidad de las plaquetas de la sangre, lo que ayuda a mantener los vasos sanguíneos abiertos y flexibles (sin coágulos), lo que a su vez ayuda a mantener un buen suministro de sangre en el cerebro. El estudio fue publicado en la revista The Journal of Neuropsychiatric Disease and Treatment.
  12. Previene la artritis: Se ha demostrado que el consumo de entre 5 a 10 copas de vino a la semana reducen hasta en un 50% las probabilidades de desarrollar artritis reumática. Además, existen indicios de que el vino ayuda a las mujeres de la tercera edad a reducir el riesgo de contraer osteoporosis.
  13. Ayuda con la diabetes: El vino tinto parece ser capaz de reducir los niveles de insulina en la sangre, ayudando de esta manera a los pacientes diabéticos. Su eficacia real está todavía en fase de experimentación pero los estudios publicados hasta el momento demuestran que el resveratrol ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre.
  14. Ayuda a la digestión: Los componentes del vino son digestivos, por lo que consumido en pequeñas cantidades es ideal para quién sufre algún tipo de dolencia estomacal.

Pero…

…no olvides que es una bebida alcohólica. Así que más cantidad, no significa más efecto. Bebe con moderación.

Por Inés Martínez en lomejordelvinoderioja.com