[Fuente: hoyinversion.com]
Los jóvenes estadounidenses de entre 21 y 31 años -pertenecientes a la denominada «Generación Y»- consumen actualmente un 40% de los vinos que se importan en el país, frente al 30% de hace unos diez años.
La denominada «Generación Y», formada por gentes educadas en la cultura de la interactividad y de Internet, ha empezado a atraer la atención de sociólogos, estudiosos y, especialmente, empresas de venta de productos en Estados Unidos.
Así lo han puesto de manifiesto el presidente de la compañía norteamericana Benson Marketing Group, Jeremy Benson, en una reciente jornada sobre marketing de vino celebrado en Logroño.
Benson, quien trabaja para importantes firmas de Napa Valley y Burdeos, sostiene, sin embargo, que los padres de estos jóvenes que ahora forman parte de la Generación Y, y que tienen entre 40 y 63 años, no han llegado a consumir más del 30% del vino importado.
En su opinión, gracias a las inversiones en comunicación, el vino español y «Rioja», en concreto, «están sonando mucho en el mercado norteamericano».
En la misma línea se han pronunciado el responsable de la campaña «Vibrant Rioja» en el mercado norteamericano, Jon Stamell, y la publicista de vinos de Rioja en Estados Unidos, Lisa Carley.
Sostienen que en el año 2000, el 57% de la población norteamericana se declaraba no consumidora de vino, frente al 43% que dice no probar este producto en 2007.
En su criterio, esta mejora se está produciendo en la denominada Generación Y.
También opinan que los vinos de «Rioja» ocupan una buena posición en la prensa especializada de Estados Unidos, pero consideran que esa posición se tiene que transmitir, sobre todo, a tiendas y supermercados especializados, como las vinotecas en España.
Consideran que los países emergentes, como Australia, Chile, Argentina y Nueva Zelanda tratan de imitar a los vinos de los países del Viejo Mundo -cuyo modelo es el de las denominaciones de origen.
Estos países emergentes han comenzado a envejecer sus vinos con el empleo de trozos de madera de roble.
Los vinos varietales y «singulares», según estos expertos, tienen una mayor aceptación en los restaurantes norteamericanos y, en particular, entre los jóvenes consumidores, que los comercializados como crianzas, reservas y grandes reservas.
Otra de las conclusiones de la reunión la ha apuntado el director general del grupo Ginestet, Christian Delpeuch, quien vaticina una concentración de empresas vinícolas de los países productores tradicionales como estrategia frente a las bodegas del Nuevo Mundo, así como la elección de una distribución también concentrada y más poderosa que la actual.
Por su parte, para el presidente de Vinexpo, Jean Marie Chadronier, en Estados Unidos cada vez se bebe más caro, lo cual considera que es una oportunidad para los vinos españoles y riojanos, en particular.