Un bodega riojana elabora un vino que servirá para llevar agua potable a un suburbio de Adís Abeba.
Los niños se beneficiarán del mejor acceso al agua en Kechene.
Según el Evangelio de San Juan, uno de los milagros más espectaculares obrados por Jesucristo tuvo lugar mientras asistía a una Boda en Caná, donde convirtió el agua en vino. Este conocido pasaje bíblico bien podría ser la inspiración de una bodega riojana que se ha propuesto convertir su vino en agua para una de las regiones del mundo que más la necesita: Etiopía.
Esta curiosa iniciativa que nos desvela el blog «La brújula verde» surge de la unión de la empresa vinícola familiar Bodegas Muga y la Fundación Cuentasueños. Hace unos meses decidieron unir sus fuerzas para elaborar un vino de Rioja exclusivo, cuyos beneficios irán destinados a surtir de agua uno de los barrios más pobres de la capital etíope. En concreto, se trata del distrito 04 de Kechene, en el que cada habitante sólo dispone de 11,5 litros de agua al día.
El resultado de este proyecto, denominado «Vino por agua» es un vino exclusivo denominado “Flor Nueva”, que recibe su nombre de la traducción al castellano de Adís Abeba. El caldo será elaborado con variedades de uva poco comunes y envejecido en unas barricas más grandes de lo normal.
Sin embargo, este vino no saldrá a la venta por los canales habituales, sino que se distribuirá entre el llamado “Club de los 300”, un selecto grupo formado por empresarios y altos directivos de grandes empresas que se han comprometido a comprar seis botellas de Flor Nueva al precio de 180 euros, todos los años. Y todo ello, de forma anónima.
Con el dinero recaudado por esta iniciativa, la Fundación Africana para la Medicina y la Investigación construirá la infraestructura necesaria para facilitar que 6.500 habitantes de Kechene puedan contar con un suministro continuado y suficiente de agua potable.
Visto en abc.es.