[Fuente: winesfromspain.com]
En el año 1997, los descendientes de Macià Batle, perteneciente a la D.O. Binissalem-Mallorca, junto con un grupo de amigos entusiastas de la vinicultura, decidieron revitalizar la tradición vitivinícola de la familia de Macià Batle que desde el año 1856 cuidaba de sus propios viñedos y elaboraba vinos reconocidos por su calidad, construyendo una nueva bodega en Santa María del Camí, esmerándose en su diseño y construcción y dotándola de los mejores recursos. El objetivo: recuperar el prestigio perdido por los vinos de Mallorca y elaborar blancos y tintos de calidad.
En el año 2003 Sebastià Rubí, hotelero y entusiasta del vino, adquiere la mayoría de las acciones, quedando como único accionista de la bodega y pasando uno de los socios fundadores, Ramon Servalls i Batle, a dirigir la empresa familiar. Fruto de esta nueva sociedad, en el año 2006, se inauguró la ampliación de la bodega, que si bien duplicó el espacio disponible, solo aumento en un 10% su capacidad de producción, destinando la mayor parte del nuevo espacio a sala de barricas y una zona para la selección de la uva.
Sus viñas propias alcanzan las cuarenta hectáreas. Además dispone de cien hectáreas más de viñas de terceros, de cuyo cultivo, labores y vendimia se encargan. Asimismo más de 50 viticultores de la comarca suministran sus uvas a Macià Batle. En la mayoría de este viñedo cultivan las variedades propias de la isla como Callet, Manto Negro y la Prensal Blanc, a las que complementan con las foráneas Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Chardonnay. La unión de todas ellas aporta a sus vinos de la D.O. Binissalem-Mallorca una personalidad y singularidad particular.