La producción podría alcanzar los 46 millones de hectolitros, 12 millones más que en 2012.
Todo apunta a que la producción española de vino alcanzará esta campaña cotas históricas ya que, según el Observatorio Español del Mercado del Vino, podría elevarse hasta los 46 millones de hectolitros, que contrasta con los 34 millones que se registraron el año pasado. De confirmarse el dato de los 46 millones, para lo que habrá que esperar aún unas semanas, se trataría de la tercera mejor cosecha desde 1987 ya que sólo en la campaña de 2003 y 2004 se superó esa cota. La producción media histórica de vino en España es de 40 millones de hectolitros.
En cuanto a precios, asegura Rafael del Rey, director del Observatorio del Vino, asegura que «lo normal es que cuando hay campañas cortas de producción se tensionen los precios pero luego normalmente se atemperan y este año, con una campaña larga, todo apunta a que los precios serán muy inferiores a los del año pasado».
Para ver la repercusión de esta elevada producción en la exportación, otra de las claves de este sector ya que mucha parte de la producción acaba fuera de nuestras fronteras, habrá que esperar a conocer las producciones de los principales competidores de España en este terreno, como son Francia e Italia y estos países, asegura Del Rey, «necesitarán nuestro vino en caso de que tuvieran cosechas cortas, y ahí estará la clave del precio, y hay indicios de que estos dos países puedan tener este año cosechas cortas, lo que beneficiará sin duda a los productores españoles».
Las primeras previsiones para Francia apuntaban que, por las fuertes tormentas registradas en zonas productoras importantes, se reducen de los 45,8 millones de hectolitros previstos en julio a los 43,8 millones. En el caso de Italia los expertos pronosticaban entre 44 y 45 millones de hectolitros. Dos cosechas cortas sin duda aunque en la media de años anteiores o inclñuso algo por debajo
En todo caso, y al margen de que la cosecha de este año sea histórica o no, el reto del sector reside en conseguir exportar el vino envasado, y no a granel como se ha hecho históricamente. La idea, como aseguran en el Observatorio del vino, es «vender a los clientes de nuestros clientes».
De la importancia de la exportación da fiel reflejo el dato de que España exportó 22,5 millones de hectolitros de vino en la campaña 2011-2012, frente a los 5,1 millones del año 2007. Esta subida de las exportaciones contrasta con la evolución del mercado interior, que ha seguido la tendencia justo contraria al pasar de los 17 millones de hectolitros que se consumían dentro de nuestras fronteras en 2007 a tan sólo 10,2 en la campaña 2010-2011, sobre todo por la caída registrada del consumo en los bares y restaurantes como consecuencia de la crisis.
Félix Solís, desbordada
Una prueba de la buena salud de esta cosecha es que las Bodegas Solís, situadas en la localidad manchega de Valdepeñas, anunció esta misma semana que intentaría mantener sus instalaciones abiertas y hacer todo lo posible para seguir molturando uva pese a estar al borde del colapso al haber recibido ya 220 millones de kilos frente a los 250 millones de capacidad máxima con que cuenta la bodega para esta campaña. Hay que recordar que precisamente esta bodega, la de Solís en Valdepeñas, está considerada la más grande del mundo por su elevada capacidad para molturar y producir vino.
Visto en abc.es.