He tenido la gran suerte de conocer a uno de los grandes Enólogos de España, y mejor persona, Alejandro Fernandez. Un Hombre sencillo, que trasmite con pasión toda la sabiduría puesta en sus creaciones.
Las cuatro bodegas que componen el legado vinícola de Alejandro Fernández y que conforman el Grupo Pesquera, comparten una historia de amor a la vinicultura que el tiempo ha ayudado a perfeccionar. El vínculo con su tierra natal se plasma también en el símbolo del grupo: la imagen del Arco y de la Torre de Pesquera de Duero, característico de sus míticos vinos ‘Tinto Pesquera’.
EL VÍNCULO CRIANZA 2006
Homenaje a la bodega paterna
Cerca de los molinos de viento de Campo de Criptana, se recuperó una hermosa construcción típica manchega reconvertida en una moderna bodega desde 1999, El nombre elegido -El Vínculo- toma su nombre de la antigua bodega paterna, allá en tierras del Duero.
Este proyecto nació con el fin de elaborar grandes vinos, de producción limitada, en La Mancha, región vitícola española por excelencia. Después de mucho recorrer la región acabó encontrando lo que buscaba: buenas y viejas cepas de Tempranillo, bien aclimatadas a las condiciones locales. Si las plantas se cuidaban bien, se seleccionaban y se controlaba su rendimiento, ese gran vino manchego, soñado por Alejandro, podía hacerse realidad. Sus vinos son testimonio de estas uvas manchegas, procedentes de excepcionales pagos, que dan lugar a vinos de inigualables aromas y sabores.
Y es que en la mancha no sólo hay quesos…
Alguna vez han tenido la sensación de tocar el cielo, estar en perfecta armonía y sintonía con el mundo en un momento determinado, por alguna sensación, estado de ánimo, una grata sorpresa, una buena compañía, un beso…. Pues así es como me sentí al catar Vínculo 2006, es como tener un deja vu, la sensación de vivir una experiencia por primera vez, pero tener la certeza de que ya conocías esa misma vivencia. Simplemente un vino para disfrutar con todos los sentidos…
El Vínculo Crianza 2006 & Made in Heaven